Soy Martina Molina, una escritora empedernida desde que a los 8 años agarrara mi libreta y mi lápiz y me negara a soltarlos hasta hoy.
Hace 4 años que soy madre de una niña preciosa. Cada nueva etapa de su desarrollo supone un reto constante para mí, porque, a veces, no tengo ni idea de cómo afrontarla.
Finalmente este año, viéndome más perdida que un pez en el desierto, decidí hacer un máster oficial en psicología infantil, en el que he ahondado en el desarrollo cognitivo y emocional de los niños y que me ha ayudado infinitamente a comprender ese cerebrito y por qué hace lo que hace…pero sobre todo, me ha ayudado a saber dónde y cómo buscar en la psicología, o la neurología pediátrica, las respuestas a los problemas que se nos plantean a los padres y poder plasmarlas en mis libros.
Porque uno de mis grandes descubrimientos estudiando psicología infantil ha sido la biblioterapia, es decir, el tratamiento de patologías y traumas a través de los libros…y guau…si la biblioterapia ha demostrado científicamente ser efectiva en el tratamiento de víctimas pediátricas *** o de trastornos de la conducta realmente serios, ¿qué no podrá hacer por un niño "normal"?
Ahora que mi peque tiene cumplidos 4 años, puedo afirmar orgullosa que a través de mis libros, mi peque
-ha adquirido vocabulario: los colores, animales, juguetes…
-ha dejado el chupete
-me ha contado ella a mí cuentos por la noche
-hemos trabajado -y vencido- su miedo a los perritos
-hemos hecho juntas la transición de dejar el pañal…y digo hemos, porque a través del libro aprendí yo más que ella…a comprender lo que sentía y a valorar sus pequeños logros.
-hemos aprendido a identificar emociones (esto más bien con el cuento de la sirena, porque el de los osos sigue sin querer mirar ni de lejos al oso que llora)
-hemos trabajado su frustración cuando una cosa "noooo saleee" y las rabietas, aunque eso, la verdad sea dicha, con un cuento sólo no se resuelve…voy a necesitar unos cuantos. (Actualización: ánimo queridos padres, las rabietas mejoran muchísimo con la edad, veréis cuando su raciocinio haga su aparición estelar y explicándole un asunto lo comprenda, eso es una maravilla de la naturaleza!!!)
-nos hemos dado besos y abrazos infinitos por la noche en la hora del cuento para atraer a la estrellita de los sueños bonitos.
-ha entrado al cole sabiendo identificar los números y contar del 1 al 10, y
-sabiendo reconocer todas las letras del alfabeto.
-he ganando muchas, muchas, horas de sueño gracias a los "cuentos en español" que también grabo en audio, mientras la peque desarrolla los mismos circuitos cerebrales que con la lectura…
Y esto no ha hecho más que empezar…
Y aunque todo lo anterior son para mí grandes hazañas de las que me siento muy orgullosa, quizá lo más importante es que desde sus 3 años tiene hábito de lectura y ahora que tiene 4 y tres meses ya ha empezado a leer sus primeras palabritas ella sola.
Creo firmemente que en esta vida hay dos tipos de personas: las que aman construir y las que se deleitan en destruir.
Las que aman construir cogen un libro y son capaces e transformar sus páginas en inteligencia, sabiduría y amor.
Las otras, no.
Yo me considero de las primeras.