Mi experiencia personal hablando de las emociones con mi hija
Cuando ella era aún muy pequeña, tendría unos dos añitos, creé el libro de las emociones. Eran ositos de peluche que estaban expresando alguna emoción en sus caras y se sugería una situación desencadenante, si bien, la idea del libro es fomentar el juego simbólico tratando de inventar situaciones que pudieran haber desencadenado esa emoción.
La cosa es que cuando mi chiquitina vio al osito que llora, le tomó manía al libro, y no quería ni verlo. No quería ni acercarse a ese libro. Jajajaja. La verdad es que es que era una situación muy graciosa. Os dejo aquí un vídeo que grabé por entonces para que veáis la magnitud de la tragedia jejeje. Es que es verlo y me saca una sonrisa
Han pasado un par de años y mi chiquitina ha cambiado mucho desde entonces.
En este curso y trimestre que lleva ya yendo al cole, me he dado cuenta de lo importantísimo que es que sepa comprender las emociones de los demás, por ejemplo: a principio del curso pasado tenía disputas importantes con un compañerito: la cosa es que él quería que se tiraran juntos por el tobogán y ella entendía que él no le permitía tirarse…claro aquello acababa en llanto, hasta que íbamos las madres a resolver el conflicto…
Y este año, podría contar bastantes, bastantes, anécdotas pero vaya, el resumen es que si los peques supieran identificar y expresar las emociones propias y las de los demás, tooodo fluiría mucho mejor.
Así que he estado indagando un poco en ese asunto del desarrollo socioemocional de los peques a estas edades y me he encontrado con este artículo, que me ha parecido super interesante
El artículo examina cómo las conversaciones sobre emociones entre padres e hijos españoles afectan la comprensión emocional de los niños. A través de un estudio con 63 madres, padres y sus hijos de 4 y 6 años, analiza las diferencias en la socialización emocional y cómo estas influyen en el desarrollo cognitivo y emocional infantil.
Importancia del entendimiento emocional
La comprensión de las emociones incluye la capacidad de identificar, etiquetar, interpretar y responder a las emociones propias y ajenas. Este desarrollo es crucial porque está relacionado con:
- Adaptación social: Los niños que comprenden mejor las emociones tienden a ser aceptados por sus pares, mostrar comportamientos prosociales y tener habilidades de regulación emocional.
- Desempeño académico: Un buen entendimiento emocional contribuye a mejores resultados escolares.
- Prevención de problemas: Los niños que carecen de esta habilidad tienen mayor riesgo de desarrollar problemas conductuales y emocionales a largo plazo.
Relación entre las conversaciones emocionales y el desarrollo infantil
Las conversaciones sobre emociones entre padres e hijos son un factor determinante en la comprensión emocional de los niños. El estudio se centra en dos aspectos clave:
- Frecuencia y calidad: La cantidad y el tipo de palabras emocionales utilizadas por los padres (etiquetas y explicaciones) afectan la conceptualización infantil de las emociones.
- Diferencias de género: Las madres tienden a hablar más sobre emociones y actuar como “guardianas emocionales” de la familia, mientras que los padres desempeñan un rol más orientado al juego y la disciplina.
El contexto cultural español
El estudio analiza la influencia del contexto cultural español, caracterizado por roles de género tradicionales. Las madres suelen asumir el rol principal en la crianza, dedicando más tiempo a actividades emocionales y cotidianas con los niños. Por otro lado, los padres tienden a trabajar más horas fuera de casa, lo que limita su participación directa en la socialización emocional.
Diseño del estudio
Se utilizaron dos tareas principales para evaluar el impacto de las conversaciones emocionales:
- Narración relacionada con el juego: Padres e hijos creaban historias con figuras y una casa de juguete, abordando temas como viajes, accidentes y reencuentros familiares.
- Reminiscencia: Padres e hijos hablaban sobre experiencias pasadas (e.g., una visita al zoológico, el primer día de escuela). Estas tareas permitieron analizar el uso de etiquetas y explicaciones emocionales por parte de los padres.
Los niños también realizaron una prueba estandarizada de comprensión emocional (“Test of Emotion Comprehension”, TEC), administrada al inicio del estudio y seis meses después.
Resultados principales
- Influencia de las madres: Las etiquetas emocionales utilizadas por las madres durante las tareas de narración relacionadas con el juego predijeron significativamente la comprensión emocional de los niños, incluso después de controlar la comprensión previa.
- Rol de los padres: Aunque las conversaciones de los padres sobre emociones se correlacionaron con la comprensión emocional de los niños, no predijeron un impacto significativo tras controlar los conocimientos previos. Esto sugiere que las madres tienen una influencia más consistente.
- Diferencias etarias: Los niños de 6 años mostraron una mayor comprensión emocional que los de 4 años, lo que resalta el desarrollo evolutivo en esta etapa.
- Tareas específicas: Las narraciones relacionadas con el juego fueron más efectivas que las reminiscencias para predecir la comprensión emocional, posiblemente porque permiten a los niños distanciarse y reflexionar sobre las emociones de otros.
Implicaciones del estudio
El artículo destaca la importancia de las conversaciones emocionales para el desarrollo socioemocional infantil y plantea varias implicaciones para padres y docentes:
- Valor de las etiquetas emocionales: Nombrar emociones de manera consistente ayuda a los niños a identificarlas y normalizarlas.
- Desarrollo de la empatía: Hablar sobre las emociones de los demás fomenta la comprensión de perspectivas ajenas.
- Educación emocional en el hogar y la escuela: Padres y docentes deben colaborar para integrar actividades que promuevan el lenguaje emocional desde edades tempranas.
- Consideraciones culturales: Los programas educativos deben adaptarse a las dinámicas culturales y de género de cada comunidad.
Propuestas prácticas para trabajar con niños
A partir de los hallazgos del estudio, se sugieren estrategias y actividades para fomentar la comprensión emocional:

- Cuentos interactivos: Crear historias que incluyan situaciones emocionales cotidianas, permitiendo a los niños reflexionar y etiquetar emociones.
- Diálogos emocionales: Incorporar preguntas abiertas durante las conversaciones, como “¿Cómo crees que se siente este personaje?” o “¿Qué te hace sentir feliz?”
- Juegos de rol: Utilizar juguetes para recrear situaciones y fomentar discusiones sobre cómo resolver conflictos emocionales.
- Actividades en grupo: En contextos escolares, organizar debates o talleres sobre emociones para desarrollar habilidades sociales y empáticas.
- Diarios emocionales: Proveer herramientas para que los niños expresen sus emociones a través de dibujos, palabras o relatos.
Artículo
Aznar, Ana; Tenenbaum, Harriet R. . (2013). Spanish parents’ emotion talk and their children’s understanding of emotion. Frontiers in Psychology, 4(), –. doi:10.3389/fpsyg.2013.00670
Después de conocer en profundidad el artículo, me doy cuenta de que aquel libro que creé y que tuvimos que abandonar jajajajaj es una herramienta valiosísima para trabajar las emociones ahora que la chiquitina ya no es chiquitina (cuando le preguntan por su edad, responde que es mayor ya, que tiene 10 años, y enseña sus dos manos abiertas con sus 10 dedos para reforzar su argumento) que es ya una “niña mayor”.