Estas navidades Papá Noel le ha traído a mi chiquitina 2 buenos regalos: una cocina y una bici.
Para decir la verdad, yo no veía un regalo muy interesante el de la cocina porque a mí misma no me entusiasma demasiado cocinar y no pensaba que a mi hija le fuera a entusiasmar, veía mucho más interesante y estimulante una buena bici para vivir fantásticas aventuras.
Pero mi pareja llevaba ya desde que nuestra peque era bien pequeña erre que erre con la cocina, hasta que ha llegado.
Buscando artículos interesantes sobre crianza encontré una publicación que hablaba del papel del padre en desarrollo del niño y ahí encontré la base científica por la que él quiere para la enana la cocina y yo la bici:
Según esta publicación, uno de los aspectos más importantes en que el padre ejerce su influencia en el desarrollo del niño es que Impulsa su tipificación sexual, o sea, que trata de incitar comportamientos masculinos en el niño y femeninos en la niña.
Así, el padre trataría de forma distinta a un niño: sometiéndolo a una disciplina más rigurosa, que a una niña: mostrándose más afectuoso hacia ella
La madre, sin embargo, considera a los hijos como niños sean del sexo que sean.
Pues después de conocer esta teoría muchas cosas empiezan a tener sentido…como el excesivo nivel de permisividad que tiene mi pareja con nuestra hija, a quien yo llamo “la niña consentida de papá” porque a todo lo que pide él dice que sí jejejejej.
Pero mi pareja no es el único que encaja en esta teoría. Hace poco me contaba una mamá que su hijo había pedido a los reyes una bici rosa porque en el cole habían trabajado un cuento que decía que el rosa es para niños.
Mientras que a la mamá le daba igual si la bici era rosa o azul, el papá dijo que por encima de su cadáver entraba una bici rosa en la casa para el niño.
Nosotras pensamos en los hijos como niños y los padres piensan en ellos como futuros hombres o futuras mujeres y los empujan a tener comportamientos de lo que el padre considera que es propio de su sexo.
Estoy convencida de que habrá muchos casos en que esta teoría no se cumple, pero yo, en mi experiencia personal tengo que decir que sí: ahora mi chiquitina, además de ser la consentida de papá nos cocina unos pasteles deliciosos en su flamante cocina…
Y quien sabe, igual el día de mañana le gusta cocinar, no como a su madre…gracias a que su papá vio en ella a una gran cheff a los 3 añitos, porque desde luego, de mí no habría adquirido tal habilidad.
Para concluir y ser justos, debo decir, que como ya estarás intuyendo, la bicicleta también le ha flipado al máximo, tanto como la cocina.
Buscando artículos interesantes sobre crianza encontré una publicación que hablaba del papel del padre en el desarrollo del niño y ahí encontré la base científica por la que él quiere para la enana la cocina y yo la bici:
Según esta publicación, uno de los aspectos más importantes en que el padre ejerce su influencia en el desarrollo del niño es que Impulsa su tipificación sexual, o sea, que tiene comportamientos distintos hacia el hijo según sea niño o niña tratando de incitar comportamientos masculinos en el niño, sometiéndolos a una disciplina más rigurosa y generar comportamientos femeninos en la niña, por ejemplo mostrándose más afectuoso hacia ella, o comprándole una cocina.
La madre, sin embargo, considera a los hijos como niños sean del sexo que sean.
Pues después de conocer esta teoría muchas cosas empiezan a tener sentido…como el excesivo nivel de permisividad que tiene mi pareja con nuestra hija, a quien yo llamo “la niña consentida de papá” porque a todo lo que pide, él dice que sí jejejejej
Pero mi pareja no es el único que encaja en esta teoría. Hace poco me contaba una mamá que su hijo había pedido a los reyes una bici rosa porque en el cole habían trabajado un cuento que decía que el rosa es para niños.
Mientras que a la mamá le daba igual si la bici era rosa o azul, el papá dijo que por encima de su cadáver entraba una bici rosa en la casa para el crío.
Nosotras pensamos en los hijos como niños y los padres piensan en ellos como futuros hombres o futuras mujeres y los empujan a tener comportamientos de lo que el padre considera que es propio de su sexo.
Estoy convencida de que habrá muchos casos en que esta teoría no se cumple, pero yo en mi experiencia personal tengo que decir que sí: ahora mi chiquitina, además de ser la consentida de papá, nos cocina unos pasteles deliciosos en su flamante cocina…
y quien sabe, igual el día de mañana le gusta cocinar, no como a su madre…gracias a que su papá vio en ella a una gran cheff a los 3 añitos.
Para concluir y ser justos, debo decir, que como ya estarás intuyendo, la bicicleta también le ha flipado al mismísimo nivel que la cocina.
La publicación, de Rocco Quaglia (Universidad de Torino) y F. Vicente Castro (Universidad de Extremadura) se puede descargar completa en pdf en este enlace